Ver el debut de Francia ante Australia en el Mundial debió ser una experiencia realmente frustrante para algunos de los ausentes importantes en la convocatoria de Didier Deschamps, y es que el seleccionador dejó sin convocar a una serie de jugadores que bien podrían haber estado en muchos de los equipos presentes en Rusia dada su calidad.
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Hombres como Alexandre Lacazette, Anthony Martial, Adrien Rabiot o Kingsley Coman quedaron fuera de la convocatoria mundialista, pero la ausencia de Karim Benzema fue la que más polémica levantó, a pesar de llevar un buen puñado de meses sin estar en las lista de Les Bleus.
El delantero fue acusado de participar en un chantaje contra Mathieu Valbuena, exjugador del Olympique de Marsella, pero finalmente fue absuelto a finales del año 2017. También fue anulada la suspensión que le puso la Federación Francesa de Fútbol, pero a pesar de todo ello, el delantero del Real Madrid no ha vuelto a ser seleccionado.
Para Zlatan Ibrahimovic, la ausencia de Benzema es totalmente inexplicable: "Si el entrenador dice que no es lo suficientemente bueno para este equipo, el entrenador es el que debería estar fuera y no Benzema. Me parece ridículo que Benzema no esté convocado, porque si quieres ganar necesitas ganadores, y Benzema lo es", dijo el sueco en Bein Sports.
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Sin embargo, construir un equipo capaz de ganar un Mundial va más allá de elegir a los mejores jugadores del país, igual de importante es armar un equipo con espíritu. Bien lo sabe Francia, que acabó desintegrándose en el Mundial 2010 y la Eurocopa 2012 tras llevar a un grupo que acabó sin armonía. Benzema simplemente no encaja en este escenario.
Muchos señalan que Deschamps no convoca a Benzema porque no tienen buena relación, pero el delantero disputó diez partidos durante y después del Mundial 2014, anotando un solo gol. Entonces la pregunta sería: ¿su talento es tan superior al de Mbappé, Griezmann o Dembélé como para arriesgar la armonía del grupo? La evidencia respalda al seleccionador en este caso.
Se esperaba que Benzema fuera clave en los cuartos de final del Mundial de 2014 ante Alemania, pero los germanos ganaron por la mínima. Mientras tanto, ya sin Benzema en el equipo, la Mannschaft volvía a cruzarse en el camino de Les Bleus en la Eurocopa de 2016, y Griezmann sí que supo hacerse notar con un doblete en semifinales que ponía a los de Joachim Löw fuera de combate.
Después Benzema tuvo la ocasión de tener otra oportunidad, pero acabó convirtiéndose en un problema. "Se ha doblegado ante la presión de una parte racista de Francia", dijo el jugador del Real Madrid en Marca. Esas declaraciones llegaron junto a la aparición de una camada de jugadores jóvenes con talento que terminó por cerrarle las puertas de Les Bleus.
Por si acaso, Noel Le Graet, presidente de la Federación Francesa, fue contundente respecto a Benzema: "La selección francesa se ha terminado para Karim", comentó.
Puede que no sea así si finalmente Zinedine Zidane toma las riendas de Francia tras el Mundial de Rusia, pero parece que bajo el mandao de Deschamps, Benzema no tendrá ocasión de vestir la camiseta nacional. Lacazette, Martial o Coman pueden sentirse frustrados, Benzema únicamente arrepentido.