Cuando militaba en el Dinamo de Zagreb, los compañeros de Josko Gvardiol le llamaban "el pequeño Pep" por el parecido de su nombre con el de Pep Guardiola. Y ahora, el croata está a punto de unirse al catalán. El Manchester City pretende cerrar un acuerdo de 100 millones de euros con el RB Leipzig por él.
Gvardiol tiene todas las cualidades que Guardiola demanda. Se ajusta a las exigencias que el entrenador necesita en su nuevo sitema táctico. Ahora no ya no hay laterales profundos. Busca centrales rápidos y con buena salida de balón que puedan jugar de carrileros.
El fichaje de Gvardiol en lugar de un lateral para sustituir a Joao Cancelo demuestra que el cambio es permanente, y completa una de las evoluciones tácticas más interesantes del técnico. Con la llegada del croata hará aún más temible la defensa del City, ganadora del triplete.