Kylian Mbappé lo expresó de la manera que solo él podría. "Me he adaptado al equipo ahora," dijo de manera confiada a los medios españoles después de que el Real Madrid apabullara al Las Palmas el domingo, con el francés anotando dos veces.
Sin embargo, por primera vez esta temporada, tal autoconfianza estaba justificada. Mbappé estuvo inmenso, habiendo sido privado de un hat-trick por una cuestionable decisión del VAR mientras pasaba la tarde torturando sistemáticamente la defensa del rival. Creó seis oportunidades, acumuló 10 acciones que generaron gol, y estrelló el balón en el poste. Fue el tipo de exhibición que la mayoría de los aficionados ha estado esperando pacientemente durante los últimos seis meses.
Para el Madrid, tiene que haber una sensación de alivio. Siempre iba a tomarle un poco de tiempo adaptarse a Mbappé, pero sus primeras actuaciones con la camiseta blanca llevaron a preocupaciones de que podría tener dificultades para alcanzar todo su potencial a pesar de estar rodeado de superestrellas. Sin embargo, ahora hay indicios de cuán bueno puede llegar a ser, y esa mejora ha llegado en el momento perfecto para el equipo de Carlo Ancelotti.
