Un informe de la División de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB), que tardó cinco años en compilarse, reveló que la causa del accidente fue una falla mecánica después de que se atascara un cojinete (también conocido como la arandela que lleva los rulemanes) del rotor de cola.
El accidente fue descrito como "inevitable", ya que la falla en el rumbo provocó un giro pronunciado a la derecha y luego el avión perdió el control. El piloto Eric Swaffer pudo hacer "muy poco" para evitar el accidente y fue absuelto de cualquier error.
Según la BBC, las grabaciones de voz del helicóptero también revelaron las últimas palabras del piloto antes de que el helicóptero se estrellara. "No tengo idea de lo que está pasando", dijo poco antes de que el avión girara hacia el suelo y aterrizara en un escalón de concreto.
La compañera de Swaffer, Izabela Roza Lechowicz, una piloto experimentada, también murió en el accidente junto con Nusara Suknamai y Kaveporn Punpare, dos miembros del personal de Srivaddhanaprabha.
El informe también encontró que cuatro de los cinco pasajeros sobrevivieron al accidente inicial, pero no a un incendio posterior que envolvió los restos en menos de un minuto.
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El inspector jefe de accidentes aéreos, Crispin Orr, confirmó en un comunicado que la tragedia fue un accidente y ofreció sus condolencias a los afectados.
"Este fue un trágico accidente en el que lamentablemente cinco personas perdieron la vida. Nuestros pensamientos están con sus seres queridos y con todos los afectados", dijo. “La naturaleza de la falla, en el rotor de cola, fue realmente muy grave, de tal manera que los dejó en una situación muy pobre. El piloto no podía hacer nada más".
Srivaddhanaprabha compró Leicester en 2010 por una tarifa reportada de £38 millones y se convirtió en una leyenda dentro de la ciudad después de supervisar una conquista de cuento de hadas en la Premier League en 2016.