El Barcelona llegó al partido del martes contra el Brest con algunas heridas frescas del fin de semana, después de haber desperdiciado una ventaja de 2-0 para empatar 2-2 con el Celta de Vigo en La Liga. Ahora, frente a la sorpresa de la Champions League, necesitaba volver a la senda de la victoria, y lo hizo, logrando una victoria por 3-0 sobre los visitantes franceses.
El Barça mostró un rendimiento controlado y profesional, dominando la posesión y permitiendo que Robert Lewandowski alcanzara su centenar de goles en la Liga de Campeones, mientras también veía lo mejor del fichaje de verano, Dani Olmo.
Fue Lewandowski quien abrió el marcador para el Barcelona,
Tras la reanudación, Olmo despejó un disparo en la línea de gol y Bizot siguió impresionando en la portería. Al final, Olmo necesitó un poco de magia para encontrar el camino y marcar el segundo gol del Barça, ya que regateó a su marcador tras un buen pase atrás de Gerard Martin y remató con calma. Rematar como lo hizo, en un solo movimiento, fue excepcional por parte del ex jugador del RB Leipzig.
El Barça debería haber conseguido el tercero a seis minutos del final, cuando un balón suelto en la defensa encontró a Pablo Torre en la frontal del área del Brest, pero su disparo fue desviado y no inquietó al portero. En cambio, fue Lewandowski quien puso el broche de oro con un buen disparo a la esquina inferior en el tiempo de descuento.
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