EDITORIAL
Al Barcelona le faltan 40 millones de euros para cumplir con la previsión de ingresar 124 en ventas antes de que cierre el ejercicio financiero de esta temporada, inicialmente previsto el próximo 30 de junio pero que se verá sujeto a demoras con toda seguridad a raíz de las incidencias generadas debido a la expansión del CoVid-19, una circunstancia que le permite al club azulgrana ganar tiempo en su objetivo de satisfacer esta cuota. La buena noticia es que ya ha ingresado casi 85 millones por lo que puede resolver la diferencia con un solo golpe y ese es el traspaso de Philippe Coutinho.
Es bien sabido que el Bayern no ejecutará su opción de compra de 80 millones de euros y que el brasileño debe regresar a la disciplina barcelonista salvo nueva orden. Quique Setién incluso le espera, según ha admitido esta misma semana, pero el club tiene otros planes para él y ya le busca acomodo en algún club inglés tras asumir que la Premier League es la única que puede permitirse un jugador tan caro pero que no ha dejado de devaluarse desde que abandonó el Liverpool en enero de 2018 para ingresar en el Barcelona.
Su salida es la que debe permitir al club catalán recuperar fuerza financiera y superar los balances sin que haya pérdidas. Hasta la fecha el Barcelona ha ingresado -o asegurado- un total de 86,2 millones de euros en ventas gracias a los traspasos de Malcom Silva (40+5), Sergi Palencia (2+1) y Alejandro Marqués (8,2), a las cesiones del propio Coutinho (8,5), Jean-Clair Todibo (1,5), Marc Cucurella (que dejará otros 6 cuando el Getafe ejecute la opción de compra, según ha confirmado), Carles Pérez (1) y Abel Ruiz -ambos con compra obligatoria por parte de Roma y Braga a razón de 11+3,5 y 8, respectivamente-, sin olvidar que Moussa Wagué puede brindar otros 10 si el Niza ejecuta su opción.
Es decir, si escuchan cantos de sirena en cuanto al futuro de Coutinho es porque, en efecto, el Barcelona le está ofreciendo a sabiendas de que con su traspaso mata dos pájaros de un tiro, generando incluso superávit en caso de lograr venderle por los 80 que pretende ingresar el Barcelona. "Le encantaría regresar a la Premier" admitió la semana pasada uno de sus agentes, Kia Joorabchian, a Sky. Hace menos de un año apuntaba a que "se le haría muy difícil enfrentarse al Liverpool", prueba inequívoca de que las cosas han cambiado y que el Barcelona, aunque le pese a Setién, le ha señalado como un año antes hizo con Jasper Cillessen. Coutinho es la clave para cuadrar los balances.