Por Jorge C. Picón - Sadio Mané se coronó junto a sus compañeros de Senegal el pasado domingo. Levantaron la Copa África, la primera en la historia del país. Un hito que hizo al pueblo salir a la calle y que los jugadores, entre ellos el del Liverpool, se encargaron de compartir en redes sociales. En una imagen de Instagram que ha dado la vuelta al mundo se puede ver al extremo en la cama de su hotel junto a la ansiada copa. Cabe recordar que marcó el penalti decisivo y fue elegido mejor jugador del torneo. Se trata del primer título con el equipo nacional para un jugador que ya ha levantado una Premier League y una Champions League con el Liverpool.
Sin embargo, al jugador no le gustaría acabar su carrera sin cumplir un sueño que tiene desde niño: jugar en uno de los grandes de LaLiga. Según ha podido saber Goal, Mané está dispuesto a abandonar el Liverpool si Madrid o Barcelona llaman a su puerta este verano y así se lo ha hecho saber a sus agentes. La situación acompaña, ya que acaba contrato en 2023 y el Liverpool, si quiere sacar algún beneficio por su venta, deberá darle salida el próximo mercado. A sus 29 (cumple 30 en abril) busca unos últimos años dorados en España.
Uno de los motivos que le llevan a querer cambiar de aires es poder entrar en la lucha por ser el mejor jugador africano de la historia. Considera que ya ha hecho historia en Liverpool y que conseguir la liga de otro país y luchar por su segunda Champions lo colocaría en el Olímpo en el que están otras leyendas como Eto'o, Drogba o Weah. Ya con esta última Copa África ha escalado muchos puestos en ese ránking.
De momento, no ha habido contactos serios entre el jugador y el club por la renovación. Además, el fichaje de Luis Díaz es una dificultad añadida pues el colombiano, recién fichado del Oporto, juega en la misma posición que el senegalés.
Mané ya fue tentado por el conjunto blanco. Fue en 2017, tras ganar la Champions al Liverpool. Por aquel entonces Zidane fue el principal valedor de su fichaje, pero el francés decidió marcharse antes de cerrarlo y esto frenó la operación. En 2019 después volvieron a intentarlo, pero sin suerte. El Barcelona también presionó para traerlo hace algunos años. Pesos pesados del vestuario avalaron su fichaje, pero no pudo cerrarse por motivos económicos.
Una historia de superación
La juventud del senegalés no fue fácil. Nació en Bambali, una pobre aldea en el sur de Senegal. Una mañana, sin decírselo a su familia, se escapó a Dakar, capital del país, para realizar unas pruebas en un equipo. Estuvo allí dos semanas hasta que lo encontraron. Sus padres, viendo el interés y las capacidades de su hijo, decidieron apoyarlo y enviarlo al año siguiente enviarlo de nuevo a Dakar a probar suerte, y allí fue descubierto por Oliver Perrin, ojeador del FC Metz. Su historia se cuenta con todo lujo de detalle en el documental 'Made in Senegal'.
Ahora que es una estrella, no se ha olvidado de sus orígenes y ha ayudado económicamente a su aldea, Bambali. Allí financió la construcción de una escuela, un hospital y un estadio. "Yo pasé hambre, trabajé en el campo, sobreviví a tiempos difíciles, jugué descalzo y no fui al colegio. Hoy con lo que gano puedo ayudar a la gente", dijo en una entrevista para Canal+. Un futbolista que, tras coronarse en su continente, quiere seguir haciendo historia en Europa.